La forma en que los consumidores viven, trabajan y se desplazan se posiciona para cambiar drásticamente en los próximos años, que es lo que el 'Proyecto Cubiq' pretende abordar al ofrecer un nuevo concepto de cómo esto podría ser.
Diseñado por Charles Keusters, el proyecto imagina el año 2035 y se centra en las soluciones de transporte sin conductor como un catalizador para el cambio cultural generalizado. En lugar de ser utilizados para llevar a los consumidores al trabajo, los vehículos actuarían como oficinas móviles para permitir que los consumidores se mantengan conectados y exploren sus pasiones.
El 'Proyecto Cubiq' imagina una sociedad que se enfoca en cero emisiones, mientras que los hiper-bucles internacionales y los aviones supersónicos permiten que los consumidores viajen libremente. La adopción generalizada de la automatización en este mundo futuro vería que muchos trabajos se vuelven obsoletos, pero esto se posiciona como una evolución que permitiría a los consumidores explorar sus curiosidades y pasiones más completamente.
Referencias: tuvie
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