Desde agosto de 2018, un dron submarino llamado RangerBot ha monitoreado el estado de la Gran Barrera de Coral, pero los investigadores de la Universidad de Tecnología de Queensland han decidido cambiarle el nombre a LarvalBot por su nueva misión ecológica. Construido para propagar bebés de coral a lo largo del arrecife, Larvalbot se llenará con un engendro de coral que aún no ha sucumbido a la decoloración de coral.
El dron comenzará su viaje en noviembre durante el próximo desove a gran escala. Con el uso de LarvalBot, las larvas de coral deben propagarse 100 veces más rápido en comparación con los procedimientos naturales. Dos o tres drones serían capaces de diseminar 1.4 millones de larvas que podrían dispersarse en un área de 1.500 metros cuadrados. Según el profesor Matthew Dunbabin, líder del equipo de robótica de QUT, "esto tiene el potencial de revolucionar la restauración de coral en los arrecifes de todo el mundo".
Crédito de la imagen: Universidad de Tecnología de Queensland
Referencias: techcrunch y digitaltrends
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